Un nuevo estudio de la Universidad de Lund en Suecia sugiere que los tatuajes podrían ser un factor de riesgo de cáncer de linfoma. Los expertos descubrieron que, después de tener en cuenta otros factores relevantes como el tabaquismo y la edad, el riesgo de desarrollar linfoma era un 21% mayor entre quienes estaban tatuados.
La investigación, liderada por Christel Nielsen, descubrió que la mayoría de las personas se hacen el primer tatuaje a una edad temprana, lo que significa que están expuestas a la tinta del tatuaje durante gran parte de su vida.
“Ya sabemos que cuando la tinta del tatuaje se inyecta en la piel, el cuerpo lo interpreta como algo extraño que no debería estar ahí y el sistema inmunológico se activa. Una gran parte de la tinta se transporta desde la piel hasta los ganglios linfáticos, donde se deposita”, afirmó Nielsen.
Resultados que demuestran que los tatuajes podrían causar cáncer de linfoma
Los resultados del estudio, que incluyó a 11 mil 905 personas, demostraron que el 21% de las personas con linfoma estaba tatuado, mientras que el 18% del grupo de control sin diagnóstico de linfoma estaba tatuado. Los expertos señalan que las investigaciones sobre los efectos a largo plazo de los tatuajes en la salud son incipientes y que necesitan más estudios para determinar la relación entre los tatuajes y otros tipos de cáncer.
Una hipótesis que tenía el grupo de investigación antes del estudio era que el tamaño del tatuaje afectaría el riesgo de linfoma. Sin embargo, los resultados demostraron que el área de la superficie del cuerpo tatuada resultó no importar.
“Aún no sabemos por qué fue así. Sólo se puede especular que un tatuaje, independientemente del tamaño, provoca una inflamación leve en el cuerpo, que a su vez puede provocar cáncer. Por tanto, el panorama es más complejo de lo que pensábamos inicialmente”, indicó Nielsen.
En conclusión, el estudio sugiere que los tatuajes podrían ser un factor de riesgo de cáncer de linfoma, pero es importante destacar que las investigaciones sobre los efectos a largo plazo de los tatuajes en la salud son incipientes y necesitan más estudios para determinar la relación entre los tatuajes y otros tipos de cáncer.