La Secretaría de Contraloría del Estado de Hidalgo, bajo la dirección de Álvaro Bardales, ha intensificado su labor de supervisión en las obras públicas, realizando más de 1,200 visitas de inspección hasta el mes de julio de 2024.
Este esfuerzo busca asegurar que cada proyecto ejecutado por entidades gubernamentales cumpla con los más altos estándares de calidad y se lleve a cabo con total transparencia.
El proceso de supervisión, pieza clave en el control de la calidad de las obras, se realiza en estrecha coordinación con las entidades ejecutoras, que incluyen presidencias municipales, dependencias estatales y contratistas.
La metodología empleada por la Contraloría se despliega en dos fases fundamentales.
La primera fase consiste en una revisión documental minuciosa, donde se examina el expediente unitario de cada obra.
Este expediente incluye información crítica como especificaciones técnicas, montos asignados, metas propuestas y el cumplimiento de las mismas. La precisión en esta etapa es esencial para establecer una base sólida para la inspección física que sigue.
En la segunda fase, la inspección física, los inspectores de la Contraloría se trasladan a los sitios donde se han realizado las obras. Aquí, se revisa detalladamente cada aspecto del proyecto, desde la calidad de los materiales utilizados hasta el cumplimiento de los plazos establecidos.
Si las obras cumplen con los estándares y especificaciones acordados, se procede a la firma del acta de entrega-recepción, que valida la correcta ejecución del proyecto.
Además de las inspecciones programadas, la Secretaría de Contraloría atiende de manera proactiva las quejas ciudadanas.
Este enfoque permite que la sociedad participe activamente en la vigilancia de las obras públicas, fomentando una mayor transparencia y un combate más eficaz contra la corrupción.
La participación ciudadana es vista como un elemento fundamental para asegurar que los recursos públicos se utilicen de manera adecuada y que las obras se entreguen en las condiciones prometidas.
El enfoque riguroso de la Contraloría está alineado con las directrices del gobernador Julio Menchaca Salazar, quien ha reiterado su compromiso con la transparencia, la calidad en la gestión pública y la lucha contra la corrupción.
Bajo este mandato, la Secretaría de Contraloría reafirma su papel como garante de que los proyectos de infraestructura y servicios públicos en Hidalgo no solo se completen, sino que lo hagan con el nivel de excelencia que los ciudadanos merecen.
A medida que avanza el año, la Contraloría continuará con su labor de inspección y supervisión, contribuyendo al fortalecimiento de la confianza pública en la gestión gubernamental y asegurando que cada peso invertido en obras públicas genere el máximo beneficio para la sociedad hidalguense.