La famosa cantante colombiana Shakira, de 46 años, ha vuelto a utilizar su música como medio de expresión personal y crítica social en su más reciente sencillo, “El Jefe”, una colaboración con el grupo estadounidense de música mexicana Fuerza Regida, lanzada el pasado miércoles. En esta ocasión, la artista no ha dejado de sorprender a sus seguidores al dedicar algunas de sus letras a su exsuegro, Joan Piqué, y resaltar el papel de Lili Melgar, quien fue niñera de sus dos hijos, Milan y Sasha, desde su infancia.
Desde hace más de un año, Shakira ha utilizado su música para expresar sus sentimientos y lanzar indirectas a su expareja, el futbolista Gerard Piqué, y su nueva novia, Clara Chía. Este enfoque en su vida personal ha generado gran interés y debate entre sus seguidores, acostumbrados a que la cantante revele aspectos de su vida a través de sus canciones.
El sencillo “El Jefe” aborda la problemática de la discriminación laboral y la diferencia de sueldo entre empleados y jefes. La canción, que comienza con el icónico “Shakira, Shakira” de su éxito “Hips Don’t Lie”, presenta letras crudas y directas que han causado controversia. En particular, la línea “Me tiene recluta, el muy hijo de puta” ha llamado la atención de sus seguidores y ha dado lugar a diversas teorías.
Sin embargo, una de las partes más notables de la canción es la dedicación a su exsuegro, Joan Piqué, con la línea “Dicen por ahí que no hay mal que más de cien años dura, pero ahí sigue mi exsuegro que no pisa sepultura”. Esta referencia ha suscitado especulaciones sobre la relación actual entre Shakira y la familia de su expareja.
Además, Shakira ha querido destacar el papel de Lili Melgar, quien ejerció como niñera de Milán y Sasha desde que eran pequeños. La inclusión de Melgar en la canción resalta su importancia en la vida de la cantante y sus hijos, lo que ha intrigado aún más a sus seguidores.
La canción “El Jefe” se suma a una serie de sencillos en los que Shakira utiliza su música como un medio para expresar sus sentimientos y opiniones personales, lo que ha mantenido a sus seguidores atentos a cada lanzamiento y ha generado debates en torno a su vida y relaciones personales. Con letras provocativas y una crítica social contundente, Shakira demuestra una vez más su habilidad para conectar con su audiencia y generar conversación en torno a su música.