Condenan a un hombre a 175 años de prisión luego de que lo encontraran culpable del asesinato de cinco personas y del intento de homicidio de otras tres en el municipio de Atotonilco de Tula. Sin embargo, debido a las limitaciones legales del Código Penal del Estado de Hidalgo, el condenado solo cumplirá 60 años de prisión, según informó la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH).
El trágico incidente ocurrió el 14 de mayo de 2023 en un espacio deportivo del fraccionamiento Paseos de la Pradera, donde el agresor abrió fuego contra un grupo de personas, dejando a cinco muertos y tres más gravemente heridas. A las víctimas que atacaron con disparos de arma de fuego fue en medio de un evento público, lo que conmocionó a la comunidad local.
Investigación y proceso judicial en Tula
De acuerdo con la PGJEH, las investigaciones las llevaron a cabo por agentes del Ministerio Público, quienes, tras reunir pruebas suficientes, solicitaron y obtuvieron de un juez de control la orden de aprehensión del responsable. Esta la ejecutó posteriormente, permitiendo que el agresor fuera presentado ante las autoridades judiciales.
Durante la audiencia inicial, la PGJEH formuló la imputación por homicidio doloso calificado y homicidio doloso calificado en grado de tentativa, con base en los datos de prueba obtenidos durante la investigación. El juez de control dictó el auto de vinculación a proceso, dando inicio al juicio penal en contra del acusado.
Sentencia y condena
Tras el desarrollo de todas las etapas del proceso judicial, la Procuraduría informó que la culpabilidad del acusado fue plenamente probada. El hombre recibió una condena de 175 años de prisión por los crímenes cometidos, una sentencia que refleja la gravedad del caso y la cantidad de víctimas.
No obstante, debido a las disposiciones del Código Penal del Estado de Hidalgo, el sentenciado solo compurgará 60 años en prisión, la pena máxima permitida en la entidad.
El caso ha dejado una profunda huella en el fraccionamiento Paseos de la Pradera y en el municipio de Atotonilco de Tula, una zona que se ha visto afectada por episodios de violencia en los últimos años. Las familias de las víctimas expresaron su esperanza de que la justicia sirva para cerrar un ciclo doloroso, aunque el impacto emocional de la tragedia sigue siendo devastador para la comunidad local.