Jair Velazquez
Emilio Azcárraga Jean dejó este jueves su cargo como presidente de Televisa en medio de la investigación por el escándalo de corrupción conocido como el ‘FIFAGate’. Este caso, que ha revelado prácticas de soborno en empresas mediáticas para obtener derechos exclusivos de transmisión de eventos futbolísticos, ha impactado profundamente al conglomerado de medios más grande de Latinoamérica.
Televisa y el ‘FIFAGate’
Televisa ha sido señalada en el contexto del ‘FIFAGate’ por su supuesta implicación en el pago de sobornos a altos funcionarios de la FIFA para asegurarse los derechos de transmisión de la Copa del Mundo. Según el Departamento de Justicia de Estados Unidos (DOJ), la empresa habría desembolsado aproximadamente 15 millones de dólares en pagos ilegales para obtener los derechos de las Copas del Mundo de 2018, 2022, 2026 y 2030. Los pagos pudieron canalizarlos a través de intermediarios, buscando influir en las decisiones de altos directivos de la FIFA.
Acuerdos y consecuencias financieras
En 2023, en el marco de una demanda colectiva en Estados Unidos, Televisa aceptó pagar 95 millones de dólares tras acusaciones de inflar el valor de sus acciones al no haber informado a sus inversionistas sobre los presuntos sobornos. Sin embargo, los efectos financieros de este acuerdo no terminaron ahí. La investigación en curso ha causado un daño a la confianza de los inversionistas, generando caídas notables en el valor de sus acciones. En lo que va de 2024, las acciones de Televisa han descendido cerca de un 5% en la Bolsa Mexicana de Valores y más del 11% en la Bolsa de Nueva York, reflejo de la incertidumbre que enfrenta el conglomerado.
Impacto en el futuro de Televisa
El futuro financiero y operativo de Televisa pende de la evolución del ‘FIFAGate’. Las investigaciones podrían acarrear no solo sanciones adicionales, sino también una posible pérdida de los derechos de transmisión de eventos deportivos. La empresa ha expresado que está colaborando plenamente con las autoridades para resolver el caso, pero ha advertido que las repercusiones de la investigación podrían afectar materialmente su desempeño financiero.
Con la renuncia de Emilio Azcárraga Jean, quien había liderado la compañía durante varias décadas, Televisa se enfrenta a una encrucijada histórica, marcada por la necesidad de restaurar su reputación en un entorno donde la transparencia y la ética empresarial se han vuelto esenciales para la sostenibilidad del negocio.
