Eduardo Sánchez
En una conferencia de prensa en su residencia oficial en Las Lomas de la capital mexicana, el embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, expresó su deseo por enfocar los recursos destinados al muro fronterizo hacia la modernización con tecnología en lugar de construir más kilómetros de bardas. Su visión para el año 2030 es que la frontera entre ambos países sea un ejemplo mundial de una estructura moderna, basada en tecnología y que respete los derechos de quienes la cruzan.
Salazar subrayó que el objetivo es mejorar la seguridad y facilitar el comercio entre ambas naciones. Enfatizó que el muro existe desde hace más de 70 años y apuntó a la importancia de aplicar tecnología para modernizar los más de 3,000 kilómetros de frontera.
El embajador destacó la interconexión entre comunidades a ambos lados de la frontera, como en Laredo, Tijuana y San Diego, y abogó por un enfoque que beneficie a ambas naciones.
Salazar también abordó el tema de la producción de fentanilo en laboratorios clandestinos en México, respaldando la postura de la canciller mexicana, Alicia Bárcena, quien afirmó que existe esta producción. Subrayó la necesidad de un esfuerzo conjunto entre México y Estados Unidos para detener el flujo de precursores químicos utilizados en la fabricación de fentanilo.
El embajador destacó que lo crucial es la acción y los resultados concretos en esta lucha contra la producción y tráfico de esta droga. Resaltó el trabajo de las fuerzas de seguridad y armadas de México en la lucha contra los laboratorios de producción de fentanilo. También destacó la importancia de detener los precursores químicos que llegan a México desde Asia y que luego son utilizados en la fabricación de fentanilo.
Ayer, el fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, también señaló que los cárteles mexicanos producen fentanilo y lo trafican a su país, subrayando la cadena de producción y tráfico que involucra a China y a los cárteles en México.
Jair Velazquez
