Andrés Manuel López Obrador concluirá su mandato presidencial con una de las tasas de aprobación más altas registradas en la historia reciente del país. Según la última encuesta de Demoscopia Digital, realizada en septiembre de 2024, el presidente cuenta con un impresionante 76.2% de aceptación a nivel nacional. Sin embargo, su respaldo es aún más significativo en el estado de Hidalgo, donde alcanza un 82.5%, colocándolo como uno de los líderes mejor valorados en la región.
Durante su sexenio, López Obrador ha implementado diversas políticas sociales que han tenido un impacto positivo en sectores vulnerables de la población. Programas emblemáticos, como las pensiones para adultos mayores, las becas para jóvenes y los apoyos a campesinos, los aceptaron en entidades como Hidalgo, donde las comunidades rurales han percibido en su administración un aliado cercano y comprometido con sus necesidades.
El enfoque del presidente en su lema “primero los pobres” ha resonado fuertemente en los sectores populares, generando una conexión genuina con los ciudadanos de estados como Hidalgo. La percepción de López Obrador como un líder que se preocupa por las problemáticas sociales ha fortalecido su imagen y apoyo en la región.
Con una aprobación del 76.2% a nivel nacional y un destacado 82.5% en Hidalgo, López Obrador se despide de la presidencia dejando una profunda huella política. Su influencia ha sido un factor relevante en las elecciones de 2024, donde su movimiento logró consolidar su permanencia en el poder, reflejando el respaldo de los ciudadanos a su agenda y políticas.
La gestión de Andrés Manuel López Obrador, marcada por un enfoque social y humanista, ha dejado un legado que seguirá siendo objeto de análisis en los años venideros, mientras su figura continúa siendo una referencia importante en la política mexicana. La transición de poder hacia Claudia Sheinbaum se llevará a cabo en un contexto de alta expectativa y reconocimiento hacia el trabajo realizado durante su administración.