El Consejo Estatal de Población de Hidalgo (COESPO), reveló estimaciones demográficas que proyectan un panorama detallado del estado para el primer semestre de este año, basándose en las proyecciones de población 2020-2070 del Consejo Nacional de Población (CONAPO).
Según estas estimaciones, Hidalgo albergará alrededor de 3 millones 264 mil 395 habitantes para el término del primer semestre de 2024. De esta cifra, se espera que 1 millón 565 mil 555 sean hombres (48%) y 1 millón 698 mil 840 mujeres (52%), resultando en proporción de 92 hombres por cada 100 mujeres.
El crecimiento poblacional estimado para este año, señala Coespo, se sitúa en 11.1 personas por cada mil habitantes, con un crecimiento natural de 21 mil 720 personas. Se proyectan 43 mil 964 nacimientos frente a aproximadamente 22 mil 244 defunciones.
En términos de migración neta interestatal, se anticipa que Hidalgo experimentará un saldo positivo de 20 mil 406 migrantes. Esto se traduce en la expectativa de que 23 mil 055 habitantes emigren a otras entidades federativas, mientras que 43 mil 461 personas se establezcan en territorio hidalguense provenientes de otros estados del país.
La densidad poblacional, medida en habitantes por kilómetro cuadrado (hab/km2), se estima en 153.5 hab/km2 para este año.
En cuanto a los hogares, se proyecta la existencia de 930 mil 27 hogares, con un tamaño promedio de 3.51 integrantes por hogar. Del total, 660 mil 319 (71%) serán liderados por hombres, y 269 mil 707 (27%) por mujeres.
El COESPO también estima que la edad promedio de los habitantes de Hidalgo será de 30 años, con una esperanza de vida de 73.89 años en promedio; 70.81 años para hombres y 77.25 años para mujeres.
Las cifras demográficas revelan que la tasa bruta de natalidad para este año será de 13.47 nacimientos por cada mil habitantes, mientras que la tasa global de fecundidad será de 1.62 hijos por mujer en edad reproductiva (15 a 49 años).
En el ámbito de la mortalidad, se proyecta una tasa bruta de 6.81 muertes por cada mil habitantes, acompañada de una tasa de mortalidad infantil de 14 muertes por cada mil nacidos vivos para el año en curso.