Al menos 17 personas fueron hospitalizadas de emergencia en Huejutla, Hidalgo, tras consumir enchiladas huastecas que adquirieron de una vendedora ambulante en el centro de la ciudad. Los afectados experimentaron síntomas graves de intoxicación, desencadenando una situación de caos en los servicios de salud locales.
Según el relato de algunos de los afectados, la mañana del domingo 7 de enero, una mujer ofrecía enchiladas huastecas en diferentes puntos del centro de Huejutla. En al menos tres lugares distintos, clientes incautos adquirieron y consumieron las enchiladas sin percatarse del peligro que les aguardaba. Horas después del desayuno, los afectados comenzaron a experimentar síntomas severos como vómito y diarrea intensa.
Alarmados por la situación, los afectados solicitaron ayuda de inmediato mediante la línea de emergencia 911 y grupos de asistencia médica. La magnitud del incidente se hizo evidente cuando se reportaron aproximadamente 30 personas con síntomas de intoxicación, aunque oficialmente paramédicos de la Cruz Roja y del Cuerpo de Bomberos de Huejutla atendieron a 17 individuos.
Los servicios de socorro médico se desplegaron en distintos puntos estratégicos de la ciudad, incluyendo la terminal de autobuses de ADO, una gasolinera y el mercado municipal. La respuesta inmediata generó un caos en la localidad, y las instalaciones hospitalarias y clínicas se vieron al borde del colapso debido a la gran cantidad de personas que requerían atención médica.
Reportes extraoficiales indican que, además de los 17 casos atendidos, se continúa evaluando a otros posibles afectados que podrían haber ingerido las enchiladas contaminadas. Las autoridades locales han iniciado una investigación para determinar la causa de la intoxicación y han instado a la población a evitar consumir alimentos vendidos por vendedores no autorizados.
Este incidente ha puesto de manifiesto la vulnerabilidad de los sistemas de salud locales ante emergencias masivas, generando un llamado a reforzar los protocolos de seguridad alimentaria y la supervisión de vendedores ambulantes para prevenir futuros episodios similares.