La película tiene dos protagonistas principales. Por un lado tenemos a Alfonso Dosal como Daniel Zavala, un actor que se cree indestructible y que está seguro de que es una gran persona, pero que se niega a ver y a reconocer las cosas que hace mal y las maneras en las que causa mucho daño a las personas a su alrededor.
Dosal de una actuación realista, construye a un personaje lleno de problemas, y que hace que, como espectador, te sientas enojado, frustrado y con impotencia. Es un personaje que nos habla sobre una de las muchas formas que puede tomar la violencia y lo que se hace para justificar o intentar esconderla.
Por otro lado, Fiona Palomo interpreta a Sandra Navarro, la actriz que protagoniza la película junto a Daniel, y es ella quien se convierte en el centro de la historia, con una actuación desgarradora y vulnerable, que le da voz a las víctimas y refleja la importancia de ser escuchada, apoyada y de saber que, cuando vas a decir algo (o a denunciar) te van a creer.
“Yo había filmado Huesera, que tiene un equipo de mujeres. Amé ese proyecto profundamente y tuve la oportunidad de construir a mi macho confitado, para poder aportar desde lo que yo entiendo. Cuando me llegó el guion de Un Actor Malo, dije: ahí está mi Huesera”, nos cuenta Dosal. “Aquí nos toca a nosotros hablar desde el lugar del abusador, sentados en la silla del juicio”, dice Dosal.
Con información de GQ