Eduardo Sánchez
Durante su intervención en el 30 Congreso de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción, la candidata presidencial de la alianza opositora, Xóchitl Gálvez Ruiz, lanzó una firme promesa que marcó la diferencia en el ámbito de la infraestructura nacional. En un discurso enfocado en la profesionalización y la transparencia en el sector, Gálvez anunció que de llegar a la Presidencia, pondría fin al control militar sobre las obras públicas, devolviendo esta responsabilidad a los ingenieros civiles.
La candidata aseguró que establecerá la “Oficina Nacional de Proyectos de Infraestructura” para garantizar que las decisiones en este ámbito sean tomadas por expertos en la materia, y no por caprichos políticos. “Se acabaron las ocurrencias, se acabaron (esas) decisiones, nunca más el despilfarro del dinero público por la improvisación, por los caprichos y ocurrencias presidenciales en obras de infraestructura”, enfatizó Gálvez.
Con esta medida, la candidata busca eliminar la falta de transparencia y rendición de cuentas que, según ella, ha caracterizado muchas de las obras realizadas bajo administraciones anteriores. “Lo hacen para no rendir cuentas, lo hacen para no transparentar el recurso público. Eso va a cambiar en mi gobierno. Los ingenieros civiles van a volver a tener trabajo. (…) Van a regresar las ingenierías y los ingenieros a los espacios técnicos del gabinete”, aseguró Gálvez, subrayando su compromiso con el fortalecimiento del sector de la construcción y la ingeniería civil en México.
Además, Gálvez abordó el controvertido tema del Aeropuerto Internacional de Texcoco, reiterando su postura de realizar un exhaustivo análisis ambiental antes de tomar cualquier decisión al respecto. Destacó la importancia de evaluar la situación del agua en la zona antes de cualquier proyecto, demostrando su enfoque en la sustentabilidad y el cuidado del medio ambiente en el desarrollo de infraestructura.
La propuesta de Xóchitl Gálvez ha generado un amplio debate en el país, destacando la necesidad de un enfoque técnico y profesional en el desarrollo de la infraestructura nacional. Con esta promesa, la candidata busca no solo ganar adeptos en el sector de la construcción, sino también sentar las bases para un gobierno que priorice la eficiencia, la transparencia y el desarrollo sostenible en todas sus acciones.
Con información de El Universal
Abigail Santos
Dulce Castillo
