Jair Velazquez
En una jornada marcada por el drama y la adrenalina, Sergio “Checo” Pérez consiguió superar una difícil sesión de clasificación para asegurarse la segunda posición de salida en el Gran Premio de China, que este domingo regresa al calendario de la Fórmula 1 tras varios años de ausencia.
Desde el comienzo de la clasificación, el piloto mexicano enfrentó numerosos retos en el Circuito Internacional de Shanghái, describiéndolo como “truculento”, una descripción que apenas insinuaba los desafíos que enfrentaría más adelante.
Durante la primera etapa de la sesión (Q1), Pérez experimentó momentos de tensión extrema, coqueteando peligrosamente con la eliminación tras una obstrucción por parte de Alexander Albon de Williams. A pesar del incidente, que no resultó en sanciones debido a las complejidades regulatorias de la FIA, Pérez logró avanzar por un margen estrecho, clasificándose en la decimoquinta posición.
“Joder, estuvo cerca”, fueron las palabras del mexicano, reflejando el alivio tras superar la primera fase con neumáticos ya utilizados. La situación para Red Bull mejoró significativamente en la Q2 con Max Verstappen mostrando su habitual dominio, y “Checo” ajustando su estrategia para evitar lo que él llamó el ‘milagro de Ferrari’, refiriéndose a la dramática recuperación de Carlos Sainz. Sainz, que había sufrido un trompo y un accidente que dañó severamente su vehículo, logró una espectacular vuelta que lo colocó temporalmente en segundo lugar, solo para ser superado por Pérez hacia el final de la sesión.
El desenlace de la clasificación fue un tenso duelo entre los titanes de Red Bull y Ferrari, con Pérez y Verstappen asegurando el segundo 1-2 de Red Bull en la parrilla de este año. “Buen resultado”, dijo un claramente satisfecho Pérez, quien a pesar de no alcanzar la pole position, demostró su habilidad para manejar la presión y mantenerse competitivo bajo circunstancias desafiantes.
“Estoy confiado que podemos pelear”, afirmó “Checo” al finalizar la jornada. “Puedo tener un gran ritmo de carrera y eso lo pondré en práctica en el Gran Premio”.
Con esta mentalidad, Sergio Pérez no solo busca su cuarto podio de la temporada, sino que también aspira a cerrar la brecha con su compañero de equipo y rival en la pista, Verstappen, quien ha dominado la temporada hasta ahora.
La rivalidad amistosa dentro de Red Bull promete ser uno de los atractivos principales del Gran Premio, mientras que los aficionados esperan ver si “Checo” puede convertir su segunda posición de partida en una victoria.
Con información de: Récord
