México rompió una racha de cinco años sin derrotar a Estados Unidos al imponerse 2-0 en un electrizante partido disputado en el Estadio Akron, en el esperado regreso de la Selección Mexicana a Guadalajara después de 14 años. La figura indiscutible de la noche fue Raúl Jiménez, cuyo talento y determinación llevaron al equipo ‘Tricolor’ a una victoria histórica.
El delantero del Fulham de Inglaterra brilló desde los primeros minutos del encuentro, cuando en un cobro magistral de tiro libre al borde del área, envió el balón al ángulo de la portería norteamericana, marcando un gol de antología que hizo estallar a los 43 mil 537 aficionados presentes. Con este tanto, Jiménez abrió el marcador al 1-0, demostrando su calidad y confirmando su estatus como uno de los jugadores más destacados de la selección.
Raúl Jiménez: el ‘Lobo de Tepeji’ conquista el Estadio Akron
Jiménez no solo se destacó por su gol, sino que desplegó un nivel sobresaliente a lo largo de todo el primer tiempo. Con sus remates acrobáticos, robos de balón y hasta un centro de ‘rabona’, se ganó el aplauso de la afición tapatía, a pesar de su pasado como jugador del América, un equipo históricamente rival de las Chivas. La hinchada, que en un inicio lo recibió con cautela, terminó ovacionándolo cada vez que tocaba el balón, consolidándose como el héroe de la noche.
El segundo tiempo y sentencia a Estados Unidos
En el arranque del segundo tiempo, la intensidad de México aumentó la presión sobre Estados Unidos. Jiménez, que había perdido un balón en el mediocampo, mostró su entrega y determinación al regresar para recuperarlo, asistiendo a César Huerta, quien definió con precisión para colocar el 2-0 en el marcador. A pesar de la impecable jugada, Huerta fue abucheado por parte de los aficionados tapatíos, quienes no perdonaron su vínculo con los Pumas de la UNAM.
Un regreso agridulce para Alexis Vega
El regreso de Alexis Vega a Guadalajara fue mucho menos grato. El exjugador de las Chivas recibió con abucheos por la afición que no le perdonó recientes polémicas fuera del campo, gritándole “borracho” cada vez que tocaba el balón. La hostilidad hacia Vega contrastó con el ambiente festivo que vivían los seguidores del ‘Tri’, quienes ya con el 2-0 a favor comenzaron a corear “ole” cada vez que los jugadores de Estados Unidos tocaban el balón.