Jair Velazquez
En preparación para la próxima sesión de la Sexta Reunión del Consejo Técnico Escolar (CTE) en las escuelas de educación básica, el equipo de observadores nacionales de la DGDC-DIE (DirecciónGeneral de Desarrollo Curricular – Dirección de Innovación Educativa) ha llevado a cabo una reunión estratégica para unificar criterios de análisis. Este encuentro, fundamental para el impulso y la mejora continua del sistema educativo, ha abordado temas cruciales relacionados con el fortalecimiento y el cuidado del docente, así como la reflexión sobre el propósito y la función del CTE en consonancia con los últimos lineamientos emitidos.
En la sesión de trabajo, que congregó a expertos y profesionales comprometidos con la excelencia educativa, se destacó la importancia de abordar el autocuidado del docente como un elemento esencial para el reconocimiento y el desarrollo de su práctica profesional. Se reconoció que el bienestar y la salud emocional de los educadores son pilares fundamentales para el éxito del proceso educativo y el logro de los objetivos pedagógicos. En este sentido, se propuso la implementación de estrategias y programas que promuevan el autocuidado, la gestión del estrés y la resiliencia en el ámbito escolar, con el fin de garantizar un entorno propicio para el crecimiento profesional y personal del cuerpo docente.
Asimismo, se dedicó un espacio significativo para reflexionar sobre el propósito y la función del CTE dentro del contexto educativo actual, en consonancia con los últimos lineamientos y directrices emitidos por las autoridades educativas. Se enfatizó la importancia de que el Consejo Técnico Escolar no solo sea un espacio de planificación y evaluación, sino también un espacio de diálogo, colaboración y aprendizaje continuo entre docentes, directivos y supervisores escolares. Se subrayó la necesidad de fortalecer el rol del CTE como un instrumento para el desarrollo profesional docente, la mejora de la práctica pedagógica y el impulso de una cultura escolar basada en la colaboración y el trabajo en equipo.
En este contexto, se acordó la necesidad de promover la articulación y la coherencia entre los diferentes niveles educativos, así como la integración de enfoques interdisciplinarios y transversales en las actividades del CTE. Se destacó la importancia de que el Consejo Técnico Escolar se convierta en un espacio inclusivo y participativo, donde se reconozcan y valoren las diversas perspectivas y experiencias de los actores educativos, en aras de construir una educación de calidad y pertinente para todos los estudiantes.
